Somos la Comunidad Cristiana Discipular Maranatha (CCDM)

Una iglesia de creyentes en el evangelio del Señor Jesucristo, enfocados en el discipulado (Mateo 28:19-20).

Servimos al cuerpo de Cristo a través del apoyo y la formación necesaria en los diferentes ámbitos de la vida de las personas.

Entendiendo que el enfoque de las misiones es el discipulado, actualmente contamos con iglesias hijas y equipos misioneros en diferentes naciones, entre ellos: Venezuela, Colombia, Chile, Perú, Argentina y EE. UU, con la finalidad de cumplir la gran comisión de “Id y haced discípulos”.

VISIÓN

Ser una red de iglesias discipuladoras en cooperación misionera conforme al reino de Dios.

 Juan 3:16; 2 Corintios 5:19.

misión

Hacer discípulos en diferentes naciones aplicando el Proyecto CCD bajo el lema “1x Año”.

Mateo 28:18-20; Hechos 1:1-10; 2 Timoteo 2:2.

PROPÓSITO

¡Glorificar a Dios!

rESEÑA hISTÓRICA

Entre finales del 1959 y comienzos de 1960, el Pastor Rubén Salazar de la iglesia Maranatha de Puerto la Cruz envía una comisión de misioneros a Puerto Píritu liderizada por el hermano Valentín Vale. El lugar en donde comenzaron sus primeras reuniones era debajo de un árbol llamado “La Chica”, ubicado en el Barrio Peñalver de Puerto Píritu.

Unos años después, la iglesia Maranatha de Puerto la Cruz envía al hermano Antonio Serrano, quien asume el pastorado de la iglesia. Durante ese tiempo, se hizo posible la compra de una casita de barro, ubicada en la calle La Laguna, que tuvo por nombre “Iglesia Emaús”, en donde se congregaban Marcos Querequechua junto a su esposa Juana de Querequechua, Santos Medina, Elena de Rodríguez, Carmen Rodríguez, Celestino Guaina entre otros hermanos.

Para el año 1980, se nombra como pastor a Marcos Querequechúa, siendo autóctono de esa localidad. En ese tiempo, tuvo conversión Arquímedes Rodríguez quien contrajo matrimonio con Neivis de Rodríguez, hija de la hermana Elena de Rodríguez. Ya para esa época se congregaban alrededor de 14 personas en la iglesia.

Durante ese tiempo, venían una vez al año unos hermanos de la iglesia Las Acacias a tener un tiempo de ayuno y oración de 40 días en Puerto Píritu. La iglesia a la que ellos asistían durante ese tiempo era Emaús, y cuando se hacían presentes los domingos en la mañana, los miembros de la congregación le cedían la dirección del servicio. En una de esas ocasiones, por medio de estos hermanos, la iglesia Emaús recibió una palabra profética de parte de Dios, que consistía en que muchas personas de diferentes partes de Venezuela llegarían a prepararse a esa iglesia para salir y expandirse por las naciones. Muchos no le dieron importancia a esa profecía y continuaron con sus actividades cotidianas, pues parecía algo loco y difícil de creer, ya que solo eran una congregación en una pequeña casa de barro.

En 1987, llega el pastor Jesús Hernández, también enviado por la iglesia Maranatha de Puerto la Cruz. Para ese tiempo, la iglesia comienza una etapa enfocada en la construcción de la nueva sede y le fue cambiado el nombre de Emaús a Maranatha 2 para poder obtener el permiso de dicha construcción, ya que la iglesia Emaús no estaba registrada ante la dirección de culto, teniendo así que usar la legalidad de la iglesia madre.